CAJAS DE AHORRO Y COMPETITIVIDAD.EMPIEZA EL BAILE…

     ¡CAN-CAN supone el inicio del baile ( con el permiso de CCM)!

     El anuncio de la llamada «fusión virtual» de CAN ( Caja Navarra) y CAN ( Caja Canarias) a través del SIP ( Sistema Institucional de Protección) supone, de hecho,propiciar el movimiento de reestructuración y ordenación de las Cajas de Ahorros-más allá de algunas operaciones intraterritoriales-,latente en el ambiente, supuestamente impulsada por el Banco de España y el FROB ( Fondo para la Reestructuración ordenada bancaria) que dice perseguir la reducción de costes de estructura y la mejorí­a en solvencia y capitalización de las entidades financieras ( y , en especial,las Cajas de Ahorros).

      Este anuncio aparece en medio de una primera batalla mediática tras producirse la primera intervención ( Caja Castilla la Mancha-CCM) a la busca de un comprador (de preferencia,otra Caja más solvente y mucho mejor gestionada).

      En el horizonte aparecen demasiadas incógnitas.Si bien parece » aceptable e inevitable un proceso de ordenación»,asumiendo una serie de «verdades idiscutibles» ( escasa dimensión,limitada capitalización,déficit de gestión,dominio polí­tico en la toma de decisiones,relativa imposibilidad para competir en un mercado cada vez «más global»),no parecerí­a tan evidente  que dichas etiquetas un tanto simplificadoras de la realidad competitiva deban llevar necesariamente a procesos de fusión sin entrar en una cierta reflexión,de corte estratégico,sobre la esencia de las Cajas,su identidad,historia, pertenencia territorial,proximidad y rol promotro del desarrollo local,además de su propiedad y estructuras de gobierno y control.

        Las Cajas no son «un banco cualquiera».Ni tan siquiera son ,en verdad, empresas privadas al uso ,ni su propiedad es tan evidente más allá de su patrimonialización y estructuras societarias formales,ni sus órganos de gobierno son una copia mimética de un Consejo de Administración ordinario,ni siquiera, la manera de aumentar tamaño( en caso de que suponga una verdad absoluta)y mercado, PARECERíA CONDUCIR A UNA DETERMINADA GLOBALIZACIí“N «GEOGRíFICA»,NI EL ATAQUE MEDIíTICO A SU «POLITIZACIí“N» DEBIERA ASOCIARSE SIN MATICES A UNA NULA O MALA GESTIí“N AL SERVICIO DE INTERESES MALIGNOS.Todo esto se simplifica tras un par de mensajes que parecen calar en la opinión publicada:»los gobiernos autónomos no quieren perder parcelas de poder» y «solamente barreras de í­ndole polí­tico impiden la objetividad y eficiencia técnica deseada en la ordenación del sector».Una gran mentira.La realidad indica más bien lo contrario.¿Tiene sentido esta figura institucional financiera de promoción y desarrollo regional y social desafecta a un territorio concreto de cuya identidad forma parte?¿Tiene sentido que el interés privado e individual prime sobre el interés general representao por las Instituciones democrática y legí­timamente elegidas por las sociedades concretas a las que deben servir?

         En plena crisis financiera en la que hemos detectado enormes fallos del sistema,en especial del mercado,en su regulación,en la escasa responsabilidad de muchos de sus actores se ha puesto de manifiesto el imprescindible rol rector de los Gobiernos,del pensamiento a largo plazo.Parecerí­a,en consecuencia,que lo que en verdad necesitamos son un tipo de estructuras e instrumentos más en lí­nea con las Cajas que de nuevas aventuras por reinventar de la mano de esa «innovadora ingenierí­a financiera de salón «que tanto daño ha provocado.

           En este contexto ,servirí­an de reflexión una serie de puntos a considerar en torno a las operaciones que parecen abrir el bailes,la CCM y su venta y la anunciada fusión virtual de las Cajas Navarra y Canaria:

1) CCM necesita un comprador ( ó alguien que sin hacerlo esté dispuesto a poner capital,gestión,criterio para asumir riesgos),una garantí­a para recibir Fondos de Ayuda Pública,contratar gestores solventes y expertos,una estrategia base sobre la que actuar y un plan de negocio creí­ble.Hoy se dice que existen posibles compradores ( otras cajas de fuera del territorio) bajo el impulso e invitación del Banco de España y del Gobierno español.

      Uno de los candidatos «según la prensa» es la BBK ( Bilbao Bizkaia Kutxa),lí­der indiscutible en rankings y ratios del sector.Su presidente, Mario Fernández,señalaba ayer ( en el marco de una conferencia en la Fundación Sabino Arana en Bilbao)las tres condiciones-criterios necesarios para su entrada en la operación » en el supuesto de que fuera verdad lo que la prensa comenta y que ellos sean invitados»:

   a) «Que nos quieran…» ( operación amistosa)

   b) «que no reduzca ni hipoteque nuestra situación patrimonial,de solvencia y rentabilidad y foertalezca nuestra solidez empresarial e institucional»

   c) «que se garantice el control  por parte de la sociedad vizcaina debidamente representada»

2) La segunda operación,la llamada «fusión virtual» anuncia el objetivo de «compartir riesgos y tecnologí­as,unificar algunos negocios ( seguros,fondos,carteras industriales),compartir redes fuera de las correspondientes áraes de influencia ( es decir, allí­ donde no están).

       En definitiva, si observamos las posiciones y principios que parecen mantener los principales actores del proceso,volvemos al principio.¿No parecerí­a razonable explorar otros modos de crecer -en caso de que ese sea el camino-y sanear las entidades desde la fortaleza de las esencias reales de las Cajas,sus estrategias naturales y ventajas competitivas demostradas? Hay mucho por hacer y cambiar,pero merecrí­a la pena hacerlo sobre lo que en verdad fortalece el proyecto y no sobre las aventuras coyunturales.