Un nuevo capítulo del serial Grecia con la ya inevitable adcuación de su ciudadanía, parlamento,gobierno y políticas económicas,sociales y presupuestarias al mandato de la «Europa a dos de Sarkozy-Merkel» y el Fondo Monetario Internacional con el «respaldo del G-20» y un trimestre de agitación,malestar e incertidumbre hasta nuevos gobiernos y nuevos modelos,parecería ceder el protagonismo a la irrupción acelerada del nuevo episodio Berlusconi-Italia.
El ya imparable rescate de Italia( se explicite de la manera que sea,bien vía Fondo de Estabilidad,fondos soberanos de terceros ó exclusión real o aparente de la eurozona) pasa por un forzado cambio de gobierno.También aquí no ha sido ni la democracia directa de los italianos a través de las urnas, ni las decisiones soberanas de un gobierno, ni los múltiples y variados exabruptos de su Presidente del Consejo de Gobierno lo que ha forzado el cambio.Un nuevo «rescate» exigido por «los mercados» y la dirección europea lo ha provocado con velocidad de vértigo ( dimisión,nombramiento de Senador vitalicio al posible candidato sustituto, aprobación por el Parlamento de un planl que han rechazado-legítimamente- durante casi seis meses y nuevo presidente además de convocatoria anticipada de elecciones , todo en 4 días con fin de semana incluído).
Que la profunda crisis económica que afecta de manera insoportable a Italia y ,por supuesto, a Grecia, España ( con el agravante de su creciente ,desbordado y empobrecedor desempleo) es evidente y exige soluciones drásticas e innovadoras no es ningún secreto.Pero, de igual forma, no resulta clara ni su solución con receta única externa ni su superación con la inmediatez requerida.No es aceptable pretender que la economía navegue en solitario al servicio de una determinada concepción del mundo,separándola de la gobernanza democrática y el marco de juego que nos hemos dado los ciudadanos.
Quienes hemos miltado desde que tenemos uso de razón en el europeismo abrazando la esperanza de construir una Europa soñada por aquellos líderes en torno a los «primeros equipos europeos» de postguerra con los Schuman,De Gasperi, Adenauer, Aguirre-Landaburu,no podemos permanecer distantes ante la nueva realidad que parece llevarnos hacia la «NO EUROPA».
El escenario de la NO- Europa es mucho más real de lo que pudiera parecer,tras una ya demasiado larga cadena de desencuentros entre las aspiraciones europeas, la no generación de europeos reales, las tensiones e impactos externos e internos que parecen superar el temor a la desunión ( «la necesidad» que diría Delors).Desencuentros provocados o causa de una desgobernanza en la que táctica de los gobiernos( con minúsculas) abandonan los valores y principios ( con mayúsculas) que pretendían construir un espacio común de paz ,libertad y prosperidad abrazando la subsidiaridad,interdependencia( federada o confederal) de sus pueblos dotándose de una gobernanza al servicio de los objetivos perseguibles y no un conjunto de personas y pueblos al servicio del gobierno de algunos.
Así, con la apuesta por crear un Mercado Interior en la Europa del ´93 y las sucesivas ampliaciones a 27,se ha profundizado en el caos y la desgobernanza. Sobre todo porque el determinismo hacia un espacio económico,contrapoder de otros dos grandes bloques ( Estados Unidos y Japón) que se supone configuraban y dominarían el mundo globalizado parecían exigir sistemas e instrumentos de gobierno globales precipitando una imparable carrera de cesión de soberanía, sin control y participación diferenciada real,dejando en débiles instrumentos internacionales la dirección de nuestro sueño,más allá de la economía.La realidad hoy es que el mundo ( y ,por supuesto,Europa) vive una creciente desigualdad y padece una desgobernanza preocupante.
Llegados a este punto,no debería sorprender la noticia filtrada en torno al diseño Francia-Alemania de una nueva Europa a dos o tres velocidades, dos o tres espacios monetarios diferenciados con euro y sin euro, sobre la base de «buenos» y «malos»,»ricos y pobres»,»duros y blandos».Es momento de abanderar una seria reflexión para confrontar «ensueños y realidades» y el verdadero rol de Europa ( y, sobre todo, de sus pueblos y ciudadanos) para reinventar este espacio deseado de una Europa de valores y prosperidad.
Hoy, resulta paradójico observar que si hablamos de Competitividad y Bienestar mundial, a la vez que determinados paises europeos se sitúan a la cabeza (Suiza-independiente, pequeño, confederal,no miembro de la UE-,Suecia, Paises Bajos, Finlandia, Alemania..), Europa en su conjunto se «desprecia» como referente de futuro desde los paises emergentes.¿Cómo es posible persistir en estrategias globales-incluso en el interior de Europa-en un espacio profundamente desigual,con economías absolutamente distintas, con prioridads y necesidades distantes,con gaps crecientes cada vez más dentro de un mismo Estado que entre dos Estados de la Unión?
Arreglemos la grave crisis económica de nuestros miembros en peligro ( cada minuto que más amenazando nuevos entrante) pero hagámoslo repensando el sueño europeo:paz,libertad,democracia,cohesión social y territorial.Esto es desarrollo económico, creación de empleo,tiqueza y bienestar.Competitividad en Solidaridad y Bienestar.Para esto si merece la pena militar en Europa.