El anuncio de una probable convocatoria electoral para el próximo 20 de Noviembre( el Presidente Zapatero acostumbra a acer las cosas por etapas: desmiente rumores,dice que no hará lo que la gente espera,termina anunciando que lo hará y finalmente puede sorprender llevándolo a cabo) resulta demasiado tardío para una coyuntura crítica como la del Estado español.España vive pendiente de una posible intervención económica,impaciente ante las medidas inevitables que se esperan en cualquier momento,paralizada por una larga inacción pública,sumida en la incertidumbre y en pleno Agosto veraniego en el que nada sucede salvo el incremento de la preocupación por la vuelta de una pesada cumbre o cuesta de Septiembre.
Así,un gobierno sin credibilidad,carente de ideas y planes,no cohesionado,no debe alargar una agonía cuyo único resultado es el fracaso.Solamente un interés partidario del PSOE para dar tiempo a su candidato para tratar de borrar su imagen como corresponsable del fracaso del gobierno del que ha sido pieza fundamental,de la esperanza de una sorpresiva mejoría espontánea de la economía o una sorpresiva iniciativa de ETA para abandonar de forma definitiva su actividad y desaparecer podrían justificar alargar esta pesadilla.Las excusas de Zapatero ( Mercados y Europa) no dan más de sí y no puede pedir a la oposición y partidos minoritarios el créadito que ni su partido,ni sus compañeros de fila ni las instancias internacionales le conceden.Zapatero debe acelerar la convocatoria electoral,aprovechar el mes vacacional para que corra el perí®odo obligatorio de la convocatoria y disolver el Congreso.Todo ahorro temporal será bienvenido.Se necesita un cambio absoluto de timón(aunque personalmente no nos entusiasme la altermativa).Zapatero-PSOE-Rubalcaba no tienen proyecto,ni ideas,ni credibilidad.Los demás tendrán la oportunidad de demostrar que tienen algo que aportar.Merece la pena asumir el riesgo.Son demasiadas las cosas que deben hacerse,de inmediato.El 20 de Noviembre queda demasiado lejos