GUGGENHEIM BILBAO: XV ANIVERSARIO.

Bilbao Guggenheim Museoa cumple sus primeros quince años de exitosa vida: icono de la vanguardia museí­stica  mundial, pionero director de la concepción de los nuevos museos, referente de la internacionalización de las instituciones culturales, ejemplo del hoy ya asumido valor de la cultura, también, como factor de desarrollo económico y competitividad de las regiones y ciudades, promotor y tractor de clusters innovadores en el trinomio arte-cultura-economí­a, foco relevante de la educación a través del arte y su apertura mental, motivo esencial en la atracción de 15 millones de visitantes  y pieza clave en la configuración de»la experiencia y destino Bilbao-Euskadi», proyecto tractor de empresas y talento locales y puerta de su internacionalización e innovación transformadora del tejido económico y social. Además, por supuesto, un gran mueso,de primera categorí­a, lí­der en su propia «industria» y espacio artí­stico-cultural, modelo de gestión y parte indisociable de la imagen ciudad-paí­s. Finalmente, no menos relevante, fuente generadora de ingresos para nuestra hacienda foral y embajador del Paí­s Vasco a lo largo del mundo.

Así­, hoy, en su XV aniversario, recibe el aplauso y felicitación generalizados, se contempla como «idea de éxito natural» e incluso, para muchos el impulsor del «modelo vasco» de competitividad, bienestar, innovación y transformación urbana de una región compleja. De igual modo, como pieza relevante de la red mundial GUGGENHEIM,»el efecto Bilbao» ha aportado sentido, valor a una marca de primer nivel mundial  favoreciendo su extensión de calidad, única, a lo largo del mundo, fortaleciendo el conjunto y cada una de sus piezas.

HOY, Guggenheim Bilbao festeja su aniversario como testimonio de la convergencia colaborativa de una Estrategia Paí­s (Euskadi, Bilbao-Paí­s Vasco) para la modernización e internacionalización del Paí­s, su economí­a y sus ciudadnos; una estrategia de revitalización y reinvención urbana (Bilbao); una estrategia «empresarial-cultural»(la de la propia Fundación Solomon R. Guggenheim) y una estrategia museí­stica de vanguardia (Bilbao Guggenheim Museoa). Un feliz cumpleaños que nos ofrece muchas lecciones para una época de crisis como la que hoy padecemos (unos más que otros). Recordemos hoy, desde el éxito, que su nacimiento no fue ni fácil ni contó con el apoyo generalizado (ni de la oposición polí­tica al Partido Nacionalista Vasco, impulsor y soporte a lo largo de esta andadura, ni de los medios de comunicación locales, ni del gobierno español, ni del mundo artí­stico establecidoni mucho menos por quienes hoy se proclaman salvadores de nuestro Paí­s). Recordemos, con especial emoción, que el punto «álgido» de su inauguración en aquel «minuto de oro» transmitido en directo por la cadena televisiva CNN Internacional anunciando el nuevo ICONO al mundo ,estuvo precedida por el asesinato -a manos de ETA- del ertzaiña José Marí­a Aguirre, en la plaza del Museo, mostrando -desde el terror- su posición contraria al proyecto así­ como a la necesaria inversión, internacionalización y modernización del Paí­s.

Guggenheim Bilbao nació no como una pieza aislada sino como pieza clave en el marco de una estrategia Paí­s. Se unió a proyectos transformadores, a una apuesta por una industria sofisticada por construir, a una potencial plataforma manufacturera, tecnológica  y de servicios especializada en marcha, en el marco de una serie de decisiones crí­ticas tomadas desde diferentes actores institucionales que creyeron en el futuro, identificaon los espacios de oportunidad y apostaron por ellos, se comprometiron con su logro, asumieron riesgos. Un proyecto concebido desde la cooperación público-público (liderando un proceso colaborativo público-privado, con raices sólidas en Euskadi y alas abiertas al mundo. Un proyecto al servicio del empleo, entonces, de futuro. Hoy, fruto del esfuerzo de todos (en especial las Instituciones, su Patronato, sus amigos, sus empresas colaboradoras, su dirección-injustamente tratada por quienes no han superado no haber sido los protagonistas de una historia en la que nunca creyeron -y, sobre todo, sus trabajadores que han hecho de la profesionalidad y la excelencia la mejor referencia de esta intensa y atractiva aún corta vida)-

De esta forma, cuando hoy celebramos este dichoso aniversario, asistimos a otra crisis, diferente. Quizás las lecciones aprendidas en la toma de decisiones dí­ficiles que llevaron a soñar un espacio de oportunidad al servicio del bienestar de las personas y aportar un futuro creí­ble y motivador para el Paí­s, nos sirvan para adoptar una actitud positiva para ganar nuestro propio futuro. Hoy, como entonces, nadie regala nada. El éxito es fruto del esfuerzo y compromiso sostenido de muchos.

ZORIONAK GUGGENHEIM .

laborativa

EUSKADI: SEDE DE LA COMPETITIVIDAD 2012

A lo largo de esta semana, una vez más, Euskadi vuelve a concentrar el pensamiento creativo e innovador, fruto de su apuesta pionera y permanente en la vangaurdia del conocimiento aplicado en el amplio y complejo mundo de la competitividad. En esta ocasión, lo hace dado su rol destacado en el espacio de la «clusterización de la economí­a».

En estos dí­as, el Instituto Vasco de Competitividad-ORKESTRA será el anfitrión de medio millar de «practitioners» del mundo de la clusterización. Hoy en dí­a, el mundo vive una generalizada apuesta por la clusterización como herramienta eficaz en la búsqueda de la competitividad empresarial, social y prosperidad de los paí­ses y sus ciudadanos. Así­, de la mano de la TCI, http://www.tci2012.com asociación mundial de expertos y organizaciones acádémica, gubernamentales y empresariales dedicadas a la práctica de la clusterización, su Congreso anual (15th TCI Annual Global Conference), permitirá contrastar novedades, aprendizaje y mejores prácticas.

El Congreso de este año se desarrolla en un momneto especial: una creciente ola recesiva en l economí­a mundial con especial virulencia y dramatismo en Europa. El momento permite constatar como aquellas regiones que, en su momento, apostaro por  el concepto COMPETITIVIDAD y la manera adecuada de conseguirla dando respuesta a las tendencias y demandas naturales que encontraban su mejor solución desde la clusterización de las economí­as presentes y deseables en un territorio determinado, han sido capaces de responder de mejor manera a los embates externos. Euskadi es un caso claro. Hoy, pese a las dudas y temores del pasao, el Paí­s vasco fue capaz de afrontar una inevitable modernización y reconversión de su economí­a, construyendo su futuro desde aquellas capacidades, empresas y valores preexistentes, asumiendo riesgos y esfuerzo hacia ina estrategia de futuro que obligó a «ir contra corriente». Hoy, 30 años después de ese cambio radical soportamos mejor la crisi que nuestros vecinos y afrontamos, desde nuestras fortalezas, una nueva etapa de cambios necesarios con la convicción de saber que, también, saldremos adelante.

El momento es especialmente oportuno. Una vez más, el «suicidio económico» de las polí­ticas seguidas por la Unión Europea para enfrentarse a una crisis mal diagnosticada exclusivamnete centrada en la punta del iceberg del sistema financiero, bajo el peor tratamiento recetado-a todos por igual- del «ajuste ví­a recorte presupuestario» y la generalizada descalificación de lo entes subnacionales, confiando en que la aproximación macroeconómic salvarí­a al enfermo, encuentra la oposición incluso del Fondo Monetario Internacional que, fiel a su historia de escasos éxitos sociales, se habí­a alineado con dichas polí­ticas. Su reciente informe de la semana pasada, si bien vuelve a insistir «en la buena dirección de determinadas polí­ticas, criticando su irregular y tardí­a implementación», destaca como Europa necesita un cambio de timón, urgente, hacia polí­ticas de crecimiento, desarrollo regional cohesionado y creación de empleo. Dichas polí­ticas serán inviables si no se produce una sustancial apuesta del sector público. La inversión innovadora, el acomoo temporal de ajustes y déficits, la prioridad en el capital humano y social, la nueva governancia infraestados, resultan vitales si en un esfuerzo de solidarida intergeneracional no se reconducen las estrategias de futuro. En el escenario actual, España y Grecia, en primer lugar  y, más tarde, Europa en su conjunto, profundizarán su crisis  hasta al menos el 2018 dando lugar a una década perdida y a una base nefasta para cualquier expectativa de futuro para las nuevas generaciones.

Esta semana, Euskadi tiene la oportunidad de anteponer modelos diferentes. Ideas contrapuestas a ese pensamiento único paralizante. Provocar el debate a la búsqueda de nuevos modelos, a la apuesta por una clusterizaión superadora del individualismo, de  la competencia suma cero, de  la globalización que prescinde de la base paí­s y soportada en  salidas individuales ajenas a las fortalezas reales de las personas, empresas y paises. Es el momento de reclamar al mundo su atención en el profundo grado de desigualdad entre regiones, advertir sobre diferentes posibilidades de supervivencia. Es el momento de decirle a los demás que el futuro no es uniforme ni mucho menos un regalo espontáneo. Responde, por el contrario, a unas aspiraciones y propósito concreto, a un saber hacer determinado, a un esfuerzo colectivo y a un compromiso a largo plazo. Esto es lo que hay detrás de la clusterización y de la competitividad. Esto es economí­a. Esto es ideologí­a. Esto es hacer polí­tica. De esto trata el Congreso que mañana iniciamos. Por supuesto se hablará de las experiencias de empresas exitosas que han sabido estblecer sistemas colaborativos para su internacionalización, innovación y desarrollo tecnológico. Estudiaremos la forma en que una infraestructura genera impacto en el dearrollo local, sus empresas y ciudadanos. Observaremos experiencias de generación de partenariados público-privados, veremos la manera de construir clusters de futuro y d apostar por la economí­a del conocimeiento en el marco de la economí­a creativa, la energí­a y la bioceincias. Pero, sobre todo, aprenderemos de la institucionalización colaborativa, de la governanza, el esfuerzo, el emprendimiento arriesgado y la glokalización sabiendo que lejos de moverte por razones «aldeanas del pasado», apostar por identidad, cultura, pertenencia y desarrollo local es la mejor de las fortalezas para mundializar la economí­a, potenciando el capitl humano y las oportunidades de empleabilidad para tu sociedad.

Clusterizar para la Competitividad. SI, pero, bien entendida, al servicio de la prosperidad de las personas.

Recuperando el debate sobre Polí­tica Industrial

    En plena crisis económica-financiera con una Europa recesiva surgen los ejemplos diferenciados de aquellas regiones y paí­ses que afrontan con mayor fortaleza y éxito la grave situación. No por casualidad, son aquellos que han apostado por la economí­a real y han creado estrategias sostenidas en favor de la industria, su renovada innovación, fortaleza tecnológica y una integrada respuesta en favor del bienestar de la mano de redes sociales (Educación y Salud).

    En este amplio contexto, los debates electorales y sociales en curso son un buen «campo de batalla» para confrontar estrategias. En el caso de Catalunya y Euskadi (Paí­s Vasco) vs. España y su desertización industrial sustituida por el «boom del ladrillo», por ejemplo.

    En el caso del Paí­s Vasco, hoy referente imprescindible en el debate europeo, se refuerzan mensajes revitalizadores de la exitosa estrategia industrial impulsada hace 30 años al acceder al autogobierno. Unas breves aportaciones al debate se recogen en la entrevista publicada, por el diario DEIA y el Grupo Noticias: 

http://www.deia.com/2012/10/05/politica/elecciones-2012/estamos-en-el-camino-de-una-nueva-independencia-real